Transcribo completo el artículo de Ignaico Escolar y dejo enlace al final del mismo.
"Hay un discurso demagógico que se ha instaurado como verdad indiscutida: que la educación en España es de las peores del mundo, que tanto PISA como la OCDE dejan a nuestra enseñanza fatal, que la culpa es de las sucesivas reformas o de los inmigrantes, o de las autonomías, o del bilingüismo, o de los funcionarios, que son unos vagos, que falta autoridad… Sencillamente, todos estos populares tópicos no son verdad: no es eso lo que dicen los informes internacionales, que pintan un panorama bastante más optimista que esa negra caricatura que tanto ha calado en la sociedad.
No se lo van a creer, pero lo que
realmente demuestran los informes de la OCDE es que somos el país del
mundo donde más ha mejorado el nivel educativo de la población durante
el último medio siglo, solo por detrás de Corea del Sur e Irlanda. A
veces se nos olvida, pero España viene de una dictadura y de un retraso
económico, social y cultural que no se arregla ni en una generación ni
en dos. Después de un avance espectacular en estas últimas décadas, los
alumnos españoles están hoy en la media de los países desarrollados, ni
mucho mejor ni mucho peor. Es un error interpretar los datos de PISA
como una clasificación deportiva. Hay tan poca distancia entre unos
países y otros que el orden casi carece de importancia: es como una
carrera ciclista que entra en meta agrupada y donde los alumnos
españoles no van a la cola, sino en el grueso del pelotón. Como explica
el sociólogo José Saturnino Martínez, «si convirtiésemos las
puntuaciones de PISA en estatura, y la media de la OCDE fuese 1,80
metros, España tendría una altura de 12 milímetros menos». Es casi el
margen de error. Las distancias son tan cortas que «si Castilla y León y
La Rioja fueran un país, serían el cuarto europeo en PISA, solo por
detrás de Finlandia, Estonia y Holanda», asegura otro especialista en
educación, el sociólogo Julio Carabaña.
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