El PP en el
gobierno de España
continúa
con sus planteamientos de reducir lo público
a la mínima
existencia. No hay área
en que los ministros del PP no metan la tijera. También le ha tocado a la Justicia que dejó de ser realmente justicia desde el
mismo momento en que dejó
ser gratuita por obra y gracia del ministro Gallardón. Ahora, el ministro que siempre
busca la luz de los focos, ha propuesto una nueva demarcación para España sobre cómo tienen que estar repartidos por la
geografía
nacional cada uno de los juzgados y el registro civil, ese que utilizamos para
inscribir nacimientos, fallecimientos, bodas y de donde obtenemos partidas de
nacimientos. En la propuesta del gobierno de Rajoy, los juzgados dejan de estar
en Lebrija para situarse en la localidad de Dos Hermanas, a donde habrá que dirigirse para cualquiera de los
trámites
que he señalado
anteriormente. Y lo que era una gestión
de un momento, se convierte en la pérdida
de una jornada. Con esta medida el PP castiga nuevamente al mundo rural al que
parece querer dejar paulatinamente sin servicios básicos, así hemos visto como en las comunidades
donde gobierna pretende dejarlos sin urgencias médicas y con la aprobación de la nueva ley de régimen local, en la que se elimina
competencias a los ayuntamientos, aleja de la administración a los ciudadanos de los pueblos y
pequeñas
localidades en los que para arreglar una farola muchos tendrán que dirigirse a su Diputación Provincial.
Conocida la propuesta por el
gobierno del Ayuntamiento de Lebrija, fue llevado el asunto al Pleno municipal
para conocimiento de la ciudadanía
y manifestar el rechazo a la nueva propuesta de demarcación. Pero a lo que no podía suscitar otra cosa que el rechazo
unánime
de todos a la propuesta del gobierno del PP porque va en contra de nuestra
ciudad, nos encontramos con que a los populares lebrijanos parece darles igual
al no votar en contra de que los juzgados de Lebrija se vayan a Dos Hermanas.
Con ello vuelven a romper una vez más
la práctica
de anteponer Lebrija a los intereses partidistas. Flaco favor le hace a su
pueblo el Sr. Bellido y sus compañeros
de partido. Dice el Sr. Bellido en su argumentación que la nueva demarcación para los juzgados tiene que
responder a criterios de “eficacia
y eficiencia”,
y que sin esta eficacia y eficiencia nos encontramos con “derroche del dinero público”. Olvida el Sr. Bellido que la
Justicia es un servicio público
al que no se puede tildar de derroche. Lo cierto es que tanto los juzgados como
el registro civil hoy tienen en peligro su continuidad en Lebrija.
Lamentablemente hoy gestiona lo público
en España
un gobierno que no cree en ello, por eso lo que realmente sería eficaz es echar de dicho gobierno a
quien desprecia todo lo público.
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