No es permisible

Conozcamos la iglesia católica, por Buenafuente

Las vacaciones de Rajoy y su responsabilidad hacia España

Peregrinas, peregrinas

Si es que la vida es la vida aunque algunos personajes quieran convertir en blanco lo que es simplemente negro.

"Para salir adelante"

Indignos para ocupar cargos públicos

Tanto el alcalde de Poyales del Hoyo como sus ediles del PP deben ser recriminados por su partido si le queda algo de dignidad. Su actuación no puede ser calificada como de barbarie, indigna y fascista. Los gobernantes tienen que ejercer pedagogía entre los gobernados y no provocar los hechos del pasado fin de semana. No se puede dar rienda suelta a tanto energúmeno. ¿Que mal les hacía que unos represaliados de la guerra civil con nombres y apellidos ocuparan dignamente una sepultura? Si algunos de esos energúmenos que vemos en el video amenazar con cortar el cuello, llegan a actuar, el alcalde indigno y fascista hubiera sido el el reponsable con su acción. El PP debe actuar y quitar de sus filas a unos sujetos inválidos para la democracia, y la fiscalía debe actuar también para que los que han actado contra la ley siendo gobernantes, queden inhabilitados para todo cargo público y condenados a lo que la ley indique.

La moderación del PP

10 fusilados por falangistas y cuyos restos habían sido identificados, tres mujeres y siete hombres, habían encontrado descanso en  el cementerio de Poyales del Hoyo. Una paloma de la paz y sus nombres cubrían la lápida. Pero al nuevo alcalde del PP, Antonio Cerro Valverde, pensó que cómo los perdedores iban a estar enterrados entre la "gente decente". Y dicho y hecho, a las ocho y media de la mañana, hora de los muertos en un terrible pasado, destrozó el nicho y  sacó los restos , que no eran dignos, para tirarlos en una fosa común.

Sus nombres eran:

Virtudes de la Puente Pérez, de 53 años;

Pilar Espinosa Carrasco, de 43; 

Valeriana Granada, de 26 años, esta embarazada de varios meses 

 Régulo Martín Plaza, de 36; 

Francisco Martín Vélez, de 69; 

Ceferino Gómez Díaz, de 82; 

Tomasa De la Peña García, de 62; 

Benjamín Gómez De la Peña, de 24 (hijo de los dos anteriores); 

Tomás Retamal Sánchez, de 32

y Emilio García Hornillos, de 34 

 Este era el nicho con su paloma de la paz como una referencia al triste pasado

 Esta es la moderación del PP

 Hoy se aprovecha de la democracia para llegar a la alcaldía. ¿Dónde hubiera estado en el 36?

Por la boca muere el pez

“Aspiro a disponer de un gobierno de centro, moderado, que sepa trabajar desde la responsabilidad y la transparencia”, dijo D. Mariano Rajoy el día que se han convocado las elecciones generales para el 20-N. Y no es la primera vez que alguien desde el PP promete gobernar desde el centro, ya lo hizo Aznar pero luego nos llevó a la derecha más extrema. Lo cierto es que Rajoy carece de la credibilidad necesaria ante sus ciudadanos para ese tipo de afirmaciones. Para gobernar desde el centro, la moderación y desde la responsabilidad, primero tenía que haber ejercido la oposición desde el centro, la moderación, la responsabilidad y la transparencia, algo  que ha carecido en los ocho años al frente de la oposición.

“Aspiro a disponer de un gobierno de centro, moderado, que sepa trabajar desde la responsabilidad y la transparencia”, dijo Rajoy. Pero la verdad es que hasta ahora se ha mostrado con total irresponsabilidad usando el terrorismo como arma arrojadiza contra el gobierno socialista, el que precisamente ha puesto a ETA contra las cuerdas. Se ha mostrado irresponsable usando la política internacional contra el gobierno. Durante la crisis económica se ha dedicado a sestear y a no realizar propuesta alguna, cuando España salga de la crisis financiera que nos acecha será recordado por haberse dedicado a colocar “chinitas en el camino”. Sin embargo se permite hablar de centro cuando se ha negado a toda política de progreso y permite que el PP mantenga a Franco como Alcalde honorario de muchas ciudades españolas, o permite que por ejemplo en Granada retiren una placa de los muros del cementerio en memoria de los fusilados del 36 frente a sus puertas. Manifiesta que “no hará recortes sociales” pero en donde gobierna cierran hospitales, centros de salud, despiden profesores y se dedican a no aplicar la ley de la dependencia. Habla de progreso, pero utiliza el catecismo católico en las políticas sociales, practicando con ello la misoginia y la homofobia. Y para colmo llegarán las elecciones y todavía no nos habremos enterado cuantos sueldos recibe y cuanto gana. Rajoy ni siquiera ha sido capaz de combatir la corrupción y su partido está atenazado por la mayor trama de corrupción ocurrida en España, no sería de extrañar que nombrara ministro a Camps caso de ganar las elecciones. Sí, sin duda de Rajoy se puede hablar muchas cosas, excepto de fiabilidad.