Por fin se acabó
2013, año fatídico donde los haya, año para no recordar por la pérdida
sistemática de derechos ciudadanos a manos del gobierno de Rajoy, tanto que me
propuse no leer, ver o escuchar ningún resumen del año que acaba de terminar. Y
comienza 2014, al que quieren llamar el de la recuperación y lo hacen después de congelar el salario
mínimo interprofesional y de cobrar grandes cantidades en sobresueldos, ¿hay
mayor indecencia? Ojalá fuera el año de la recuperación del empleo, de la
recuperación de la universalidad de la sanidad y de la educación, de la
recuperación de la lucha por la igualdad, de la recuperación de los derechos
ciudadanos y laborales eliminados a golpe de Consejo de Ministros, de la recuperación
de la Ley de la Dependencia, de la revalorización automática de las pensiones… Esa
es la recuperación que queremos los ciudadanos de a pié. Pero mucho me temo que
el Partido Popular no se refiere a esta recuperación. Mientras tanto siguen en
sus treces con los recortes hacia los sectores más débiles de la población como
los pensionistas que siguen perdiendo capacidad adquisitiva y para los que
utilizan la subida del IPC para aumentarles el copago farmacéutico seis veces
más que las pensiones. El gobierno se atreve a sacar pecho cada día sin motivo
para ello mientras que los salarios siguen bajando y los precios continúan
subiendo. Al mismo tiempo amenaza a la mujer con su llamada reforma de la ley
del aborto a las que pretende dejar en la ilegalidad en el 91 % de los casos
por los abortos producidos en 2013, abortos que ahora se tendrán que producir
en los países de nuestro entorno y considerando si tienen medios económicos
para ello, pues los abortos que ilegaliza la ley de Gallardón cuestan en el extranjero
entre 550 y 6.400 €. Fuerte la agresión producida hacia la mujer, propia de
países totalitarios, a la que imponen una maternidad no deseada. El ministro de
Justicia equivoca el camino, y es que como ministro tendría muchas cosas que
hacer antes de crear sufrimiento a las familias, sólo con la cantidad de
defraudadores y corruptos tendría trabajo más que suficiente para ocupar las
veinticuatro horas del día, pero quizás eso no le interese.
Pero la guinda de
las medidas del gobierno de Rajoy en el año que comienza viene hacia nuestros jóvenes
que ya vienen sufriendo el duro golpe del paro juvenil y que buscan
alternativas a la falta de empleo con la emigración a la fuerza hacia otros
países. Y es que acaban de anunciar que se les considerará como no residentes y
les será retirada la tarjeta sanitaria, perdiendo con ello el derecho a ser
atendidos en hospitales españoles. Agresión del gobierno a la juventud y a la
universalización de la sanidad que no hace sino agravar el estado en que viven
nuestros jóvenes y eso que les hace el favor de desaparecer de las listas del
paro en nuestro país. 2014 no será el año de la recuperación porque las grandes
empresas obtengan mayores beneficios, lo será en todo caso si por parte del
gobierno del PP se deja de crear sufrimiento hacia sus ciudadanos.
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