"No hay salida socialista para la crisis. La economía de hoy no admite extravagancias ideológicas” dijo este fin de semana Mariano Rajoy. El mismo que solicita “medidas de verdad”, las mismas que su jefe José Mª Aznar dice con claridad y cierta desfachatez. Pero Zapatero le ha dejado claro que “nunca aprobará despidos baratos, recortes sociales, ni bajadas de las pensiones”. Y es que los despidos baratos, recortes sociales y bajada de pensiones son “las medidas de verdad” que reclama el PP, las que para Rajoy son de “sentido común”, ese sentido del que tanto hace gala y que le sirve para nombrar candidato del PP a las elecciones europeas a un franquista, Mayor Oreja, que se negó a condenar el régimen de Franco en el Parlamento Europeo por “representar una época de extraordinaria placidez”.
“No hay salida socialista para la crisis. La economía de hoy no admite extravagancias ideológicas” dijo Mariano Rajoy, el hombre del “sentido común”. Pero Zapatero le ha dejado claro que “los trabajadores no deben pagar una crisis que no han provocado”, que contra la crisis más inversión pública y nada de recortes sociales, las mismas medidas que ha aprobado Obama en Estados Unidos. Y es que las políticas del PP se basan en la imposición de un liberalismo salvaje en lo económico y en lo social a pesar de ser el auténtico causante de la crisis económica; así como la imposición de la moral católica para todo el mundo. Lo dicho, la España en negro.
