martes, 18 de diciembre de 2007

Llenamos el centro

Es sorprendente como está cambiando la situación en Lebrija. Y es que los nuevos tiempos están llegando a nuestra localidad. Lebrija se está moviendo, se le va notando el pulso, está saliendo del parón de cuatro años a que la sometieron los miembros del tripartito que encabezaban Don Jerónimo del PA y el Sr. Caro del PP. Como muestra basta un botón. No hay más que coger una tarde cualquiera y darse un paseo por el centro urbano de Lebrija. Lo que antes era vacío, hoy está lleno de público de todas las edades. Jóvenes, niños y mayores llenan de alegría la plaza y las calles comerciales de Lebrija. Lo que antes era silencio, hoy destaca por el ir y venir constante de personas de un lado para otro. Y es que unas políticas acertadas del nuevo Ayuntamiento están sirviendo para revitalizar nuestro casco antiguo de Lebrija. No había más que poner el trabajo y la creatividad al servicio de Lebrija y ahí está la pista de patinaje, las actuaciones de mimos, los concursos y exposiciones de dulces típicos lebrijanos, pestiños y tortas, concursos de dibujos, la zambombá de la Hermandad de la Humildad que han tenido el acierto de trasladarla a la Plaza de España, el trenecito que lo gestiona la asociación de familiares de enfermos de alzheimer, la magnífica iluminación, con lámparas de bajo consumo, en la que por fin la avenida de Andalucía ha dejado de ser la gran olvidada de siempre. Y es que por haber, hay hasta un concurso de parchís para niños y niñas, y es que la Delegación de la Infancia también se está dejando notar de manera sobresaliente. No podemos tampoco dejar de lado el concurso de escaparatismo que hace que los comerciantes de Lebrija se vuelquen en mejorar sus exposiciones o escaparates para una mejor presencia de sus productos. Y es que la nueva Lebrija se está dejando notar. Esta navidad es diferente en un pueblo más limpio a pesar de lo que va diciendo Don Jerónimo en sus andanzas por nuestra ciudad.


Hay que conseguir que el casco antiguo cobre vida y es cierto que con las medidas señaladas anteriormente se está avanzando bastante en este objetivo. Que duda cabe que las obras de la calle Arcos darán un empujón en su revitalización. Y es que con un casco antiguo vitalista, dinámico, alegre, con un centro comercial funcionando, ganamos todos. Sale ganando Lebrija, nuestros comerciantes y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas de nuestra localidad. No se podían dejar morir nuestras calles más emblemáticas sin caer en el esfuerzo, con ello caería también nuestro comercio y Lebrija sería una ciudad sin tono, ese tono vital que afortunadamente está empezando a recobrar.


Pero no podemos olvidar que todo pastel tiene una guinda. Para que todo esté más completo, mejor terminado y más reforzado nos falta añadir los aparcamientos. Y es que los aparcamientos deben servir para que los lebrijanos y lebrijanas podamos acudir al centro con la facilidad de la que hoy carecemos. Los aparcamientos son necesarios para conseguir esa revitalización que tanto necesita nuestro casco antiguo.


La ciudad de Lebrija tiene que cambiar la situación de tráfico que vive actualmente en la que los lebrijanos y lebrijanas acuden al centro y no tienen donde poder dejar sus vehículos. Lo realizado en esta navidad por la nueva corporación municipal no es más que un botón de muestra del centro que todos queremos y perseguimos, al que le faltan los aparcamientos para que todo esté mucho más completo. Los aparcamientos, en definitiva, nos permitirán poder disfrutar de ese centro urbano peatonal que todos deseamos y que además sirva de revulsivo definitivo a nuestro comercio porque así, de esta manera, ganará Lebrija y, sin duda, ganaremos todos.