"Pido un adelanto de las elecciones y la disolución del Parlamento andaluz” dijo D. Javier Arenas presidente del PP de Andalucía. Y lo dijo a escasos meses de las últimas elecciones celebradas y que ganó el PSOE con mayoría absoluta y dieron un gobierno estable y firme a nuestra tierra. Y es que pedir este adelanto al poco tiempo de haberse celebrado las anteriores, no puede parecer otra cosa que un intento de deslegitimar los resultados electorales, algo que dice muy poco de la idea que tiene de la democracia. Y desde luego muestra poco respeto por la decisión de los andaluces ante las urnas.
"Pido un adelanto de las elecciones y la disolución del Parlamento andaluz” dijo D. Javier Arenas que prometió una oposición constructiva, algo de lo que se olvidó enseguida para instalarse en la bronca y crispación continua. Y quien no arrima el hombro ante la crisis económica no hace otra cosa que demostrar que no le preocupa la crisis, ni los parados, ni la vivienda, las pymes o la violencia de género. Lo cierto es que quien ha perdido tres elecciones contra Chaves, muestra excesivas prisas por ocupar el gobierno. Quizás porque sabe que el PP está perdiendo la confianza en él y ha escuchado que lo quieren mandar a Europa en las próximas elecciones europeas.
"Pido un adelanto de las elecciones y la disolución del Parlamento andaluz” dijo D. Javier Arenas. En un momento de estabilidad política, con un escenario de concertación, es la hora de centrar esfuerzos. Pero Arenas sigue sin creer en Andalucía. Y es que por la boca muere el pez.
