martes, 20 de julio de 2010

Por la boca muere el pez

“Ha recibido infinidad de propuestas mías. Si usted no se ha enterado, pregunte a sus ministros”, dijo Rajoy en el debate sobre el estado de la nación. Se lo dijo a Zapatero. Muy claro, con el cinismo que caracteriza al que pretende ser líder del PP. Y es que no hay mayor cinismo que el que anuncia algo a sabiendas de que lo que afirma no es cierto, y a sabiendas también que conoce que los que le escuchan saben también que no es cierto. Pero así es Rajoy y así ha venido actuando desde sus comienzos.

“Ha recibido infinidad de propuestas mías. Si usted no se ha enterado, pregunte a sus ministros”, dijo Rajoy en el debate sobre el estado de la nación. Pero la verdad es que los ciudadanos tampoco se las hemos escuchado. Ni una sola propuesta desde el comienzo de la crisis económica que asola al planeta. Y por lo tanto, en estos días del debate sobre estado de la nación, tampoco se le ha oído propuesta alguna, tan sólo el adelanto de las elecciones si eso se puede considerar como tal. Y es que a Rajoy tan solo le interesa la crisis como medio de ganar votos para llegar a ser Presidente del gobierno de España. Sólo ha intentado aprovecharse de la crisis y para nada ha arrimado el hombro para ayudar como han hecho en toda Europa los partidos y líderes que están en la oposición.

“Ha recibido infinidad de propuestas mías. Si usted no se ha enterado, pregunte a sus ministros”, dijo Rajoy en el debate sobre el estado de la nación. Lo cierto es que el Sr. Rajoy sólo se ha dedicado a poner chinitas en el camino y palos en la rueda. No es Rajoy un estadista, ni se le ha visto detalle alguno que muestre sentido del estado, ni en política exterior que se ha dedicado a deteriorar la imagen de España en el extranjero, ni ante la política antiterrorista, ni ante la crisis. Rajoy es tan sólo un patriota de pacotilla. Y es que por la boca muere el pez.