martes, 29 de junio de 2010

Por la boca muere el pez

“No lo descarte usted”, dijo Don Mariano Rajoy en una entrevista que le hizo Concha García Campoy en televisión. Y ahí se dedicó a hablar de fútbol que parece que es lo único importante en estos días. Y soltó algunas perlas que dejaron asombrados a todos, en especial a Sara Carbonero que sin quererlo ni beberlo se ha convertido en protagonista del mundial, también para Rajoy. Y es que así parece esconder su falta de propuestas económicas ante la crisis. Y lo dijo claro, “ni el PP es culpable de la crisis, ni Sara Carbonero lo sería de que eliminasen a España de Sudáfrica”.

“No lo descarte usted”, dijo Don Mariano Rajoy en una entrevista que le hizo Concha García Campoy en televisión. Y ante tanta sabiduría futbolística mostrada, uno de los que intervenían en el programa le indicó que podría sustituir a Vicente Del Bosque como seleccionador. Y ahí es donde soltó la frase de marras, “no lo descarte usted”. Y es que el Señor Rajoy que tiene mono de poder está dispuesto a lo que sea por llegar a tocarlo. Y si en política le tienen cortada sus aspiraciones, ¿por qué no en el mundo del futbol? Ahí también podría seguir representando el papel de Mister No que tan bien ejerce en la política. No a lo que sea, algo en lo que realmente es un experto.

“No lo descarte usted”, dijo Don Mariano Rajoy en una entrevista que le hizo Concha García Campoy en televisión. Y es como entre los españoles que no le votan y sus compañeros de partido que tampoco confían en él, parece que no le queda otro camino que volverse a ocupar su puesto de registrador de la propiedad en Santa Pola y esto sólo le satisface económicamente, sólo quedaría evidentemente el puesto de seleccionador. Claro que si en política no es capaz de dirigir a sus compañeros Arenas, Doña Esperanza, Aznar, Fabra, Gallardón…, al menos podría intentarlo con los Xavi, Villa, Iniesta, Navas, Piqué… Aunque no sé si al final confundirá nuevamente su papel y se los lleva a bombardear Irak o a recoger “los hilillos de plastilina”, léase chapapote, a las playas de Galicia. Y es que por la boca muere el pez.