lunes, 21 de junio de 2010

Sostenimiento de la iglesia católica

Quedan pocos días para que termine la campaña de la Declaración de la Renta. Durante la misma todos los años nos encontramos con la disyuntiva de marcar la casilla para dedicar el 0,7% de nuestra cuota íntegra al sostenimiento de la iglesia católica o marcar la destinada a otros fines sociales (destinadas a ONGs entre las que también se encuentran las de la iglesia como Cáritas o Manos Unidas). Al mismo tiempo todos hemos podido ver una campaña en las televisiones, radios, prensa… organizada por la iglesia católica en la que se nos pide que marquemos la casilla dedicada al sostenimiento de la iglesia católica que se fundamenta en la “gran labor que la iglesia hace por tantos”, dando a entender que ese dinero se dedica a los pobres, a los ancianos o a enfermos. Como entiendo que esta publicidad es claramente engañosa, es decir, mienten, es decir, pecan, es conveniente que analicemos cómo se financia actualmente la iglesia católica. Y sobre todo en esta época que hay recortes para todos menos para los integrantes de la iglesia católica.

Si marcamos la casilla para “el sostenimiento de la iglesia católica”, no estamos pagando los más de 600 millones de euros que el Estado dedica a los más de 33.000 profesores de religión que existen en colegios e institutos, nombrados a dedo por el obispo sin haber pasado por ningún tipo de oposición. Tampoco pagamos los 17 millones de euros destinados a pagar los sueldos de 800 sacerdotes que hay en hospitales, 130 en cárceles, o 110 en los cuarteles, además de un obispo.

Si marcamos la casilla para “el sostenimiento de la iglesia católica” tampoco estamos abonando los 79 millones de euro que recibe la iglesia para Cáritas a través de la casilla “para otros fines sociales”, con la que evidentemente se realiza una gran labor pero cuyos dineros no provienen de la casilla para “el sostenimiento de la iglesia católica”.

Si marcamos la casilla para “el sostenimiento de la iglesia católica” tampoco estamos pagando el sostenimient6o y mantenimiento de su patrimonio artístico e inmobiliario. Más de 280 museos que posee la iglesia, las 103 catedrales y más de mil monasterios, son conservados por los más de 200 millones de euro que aporta el Estado anualmente para este fin.

Si marcamos la casilla para “el sostenimiento de la iglesia católica” tampoco estamos pagando los centros sanitarios concertados existentes y que son propiedad de la iglesia. Esos se financian con los conciertos establecidos con cada comunidad autónoma donde se encuentran, con donaciones de entidades privadas y con el cobro de los servicios que dan.

Si marcamos la casilla para “el sostenimiento de la iglesia católica” tampoco estamos pagando los sueldos y seguridad social de los 81.000 profesores, que tampoco han pasado por oposición alguna, y administrativos de la escuela privada concertada que atiende 1.300.000 alumnos en España, así como su mantenimiento. El Estado abona anualmente para estos centros 3.200 millones de euros. Que por cierto hay que señalar que el concierto prohíbe cobrar a los usuarios pero lo hacen con descaro, y para colmo se permiten poner pegas a la admisión de determinado tipo de alumnado.

Si marcamos la casilla para “el sostenimiento de la iglesia católica” estamos pagando únicamente el sueldo de los sacerdotes, su seguridad social, sus misas y sus actividades pastorales. A eso es a lo que va dedicado el 0,7% de la cuota íntegra de cada contribuyente. Y con ello reciben más de 215 millones de euros. En ningún caso, como nos quiere hacer ver con su publicidad engañosa va destinado a pobres, enfermos y ancianos pues para esos fines lo reciben del Estado por otras vías como he ido señalando. Y es que la iglesia cuando se trata de dinero se olvidan del cielo, ya hemos visto que poseen bancos, y era la poseedora de la intervenida Caja Sur. Tampoco hay que olvidar que cuando se va construir una nueva iglesia, reciben el solar gratuitamente como si de un hospital se tratara. Y por otra parte tampoco paga la iglesia más 750 millones de euros anualmente en excepción de impuestos que sí abonamos el resto de los mortales. Por cierto en breve nos va a visitar el Papa. El Estado y no la iglesia católica es la que va a abonar los 2.000 millones de euros de su visita. ¿Cuándo le va a tocar a la iglesia católica los recortes?

(Es importante señalar que todos estos datos son referidos a 2006, con el consiguiente aumento de estos cuatro últimos años.)