viernes, 23 de febrero de 2007

Tal como son

Qué duda cabe que ésta ha sido una mala semana para el candidato del PP en Lebrija pues los ciudadanos hemos podido ver de forma nítida y clara cómo gobiernan y para quien lo hacen, cómo anteponen los intereses privados por encima del de la mayoría de lebrijanos y lebrijanas. Esas son las maneras del PP en España, en Andalucía y, aunque hayan querido camuflarlo, también en Lebrija. Y aunque el Sr. Caro del PP nos ha querido mostrar una imagen populista y amable, ésta ha ido desapareciendo para mostrarse tal como es, como un digno representante en Lebrija de los Aznar, Rajoy, Zaplana, Acebes y Arenas, esa derecha intransigente, que creen que el poder les corresponde por naturaleza o por herencia divina y que se revuelven como un tigre malherido cuando lo pierden. Esa derecha que no ha podido asumir jamás que los andaluces votemos al Partido Socialista porque significa gobernar para los intereses públicos y para el progreso. Ellos no construyen sino que destruyen. Allí donde tocan poder arrasan con todo lo público. Y aquí en Lebrija tan sólo hemos tenido una pequeña muestra. He visto cómo en su página web, Don José Caro ya no se oculta y nos pone un enlace hacia esa asociación de ultraderecha que representa la AVT y que dirige el Sr. Alcaraz, y cómo en su entrevista nos habla de terrorismo y repite las consignas que hemos oído una y otra vez al Sr. Rajoy y que tanto rechazo ha provocado entre los españoles de bien porque se demostraron que no eran verdad.
Dice el Sr. Caro del PP en la entrevista que muestra en su folleto que “no se ha preocupado de vender su labor” y que por eso no se tiene mucho conocimiento de ello en la calle. Y lo dice después de aprovechar cualquier minucia para dar una rueda de prensa. Lo dice después de repartir un folleto a todo color y en papel de la máxima calidad casa por casa, después de haber repartido igualmente otro folleto también casa por casa contándonos que “han gestionado” mil viviendas en Lebrija. Sin embargo en el último folleto nos dicen que han entregado 347 viviendas. Juegan con las palabras con la única intención de confundirnos. Pues la dura realidad es que tan solo han construido 34 viviendas, sólo 34 viviendas en cuatro años, porque lo público al PP no le interesa y esa es la muestra. El resto la construyeron los socialistas y eran viviendas a las que sólo les faltaba pintar, dar algún retoque o tan solo entregar. Por eso juegan con las palabras. Por eso no pueden hablar de las viviendas que “han construido”. Por eso dicen en su folleto que “han gestionado” viviendas. ¿Qué es “gestionar una vivienda”? Yo sé, y todos sabemos, lo que es “construir una vivienda”. Pero “gestionar”, ¿qué es “gestionar una vivienda”? Está claro que sus manos están demasiado vacías para mostrárselas a los lebrijanos y lebrijanas, porque si no, no se entiende ese juego de palabras para ocultar la realidad: que sólo han construido 34 viviendas en casi 4 años.
Dice el PP en su página web con la imagen del Delegado de Vivienda: “Vivienda para todos”, pero no explica quienes son ese “todos”. Desde luego no son para los más jóvenes que no pueden acceder a las viviendas de renta libre, ni para las familias necesitadas de las que continuamente se olvida el PP. Y con 34 viviendas pretenden justificar su trabajo en cuatro años, con 34 viviendas pretenden que los lebrijanos confiemos en el Sr. Caro.
He podido ver a D. José Caro en la televisión local justificarse ante los lebrijanos diciendo “lo que hemos hecho es absolutamente legal”, refiriéndose a las 214 VPO que se han perdido para Lebrija gracias a una decisión suya. No se trata de eso, por supuesto que es legal, faltaría más. Pero miren, si el acuerdo de la Comisión de Gobierno donde se aprueba el Plan Parcial de 176.000 m2 lo hubiesen tomado tan sólo cinco días más tarde, también hubiese sido absolutamente legal. Y además se hubieran construidos 214 Viviendas de Protección Oficial con precios más asequibles para jóvenes y para familias más necesitadas. Aquí ha perdido Lebrija, y ha ganado un particular gracias a la decisión del PP, que se embolsará unas plusvalías cercanas a los dos mil millones de pesetas. D. José Caro se justifica hablando de legalidad, pero ése no es el tema. Ésta es una cuestión de ética y de moralidad, de beneficiar a 214 familias y no a un particular.

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