lunes, 19 de diciembre de 2011

Por la boca muere el pez

“Puede abrir quien quiera, a nadie se le obliga”, contestó chulescamente Esperanza Aguirre a pequeños comerciantes ante su Ley de Dinamización del Comercio que pretende que los comercios abran las 24 horas durante todos los días del año. Dice Aguirre que con esta medida pretende dinamizar la economía y aumentar el consumo para ayudarnos a salir de la crisis. Pero los pequeños comercios no pueden aumentar los turnos de empleados y seguir siendo rentables. Esta medida más parece una operación con la ayuda del gobierno del PP para que el gran comercio pueda absorber al pequeño.

“Puede abrir quien quiera, a nadie se le obliga”, contestó chulescamente Esperanza Aguirre a pequeños comerciantes ante su Ley de Dinamización del Comercio que pretende que los comercios abran las 24 horas durante todos los días del año. Lo cierto es que el PP no ha querido ver que la liberalización total que pretende Doña Esperanza puede disminuir el gasto medio por persona en el pequeño y mediano negocio formado en su gran mayoría por autónomos, empresas familiares o comercios de  menos de cinco empleados. Y es que este comercio no dispone de los recursos necesarios para poder abrir las 24 horas al día.

 “Puede abrir quien quiera, a nadie se le obliga”, contestó chulescamente Esperanza Aguirre a pequeños comerciantes ante su Ley de Dinamización del Comercio que pretende que los comercios abran las 24 horas durante todos los días del año. Lamentablemente el PP se muestra como el partido que ampara a las grandes empresas por encima de las pequeñas. Con esta ley el futuro es negro para este pequeño comercio incapaz de competir con las grandes empresas. Ello no traerá consigo otra cosa que la pérdida de ingresos, y a la larga el cierre por la competencia desleal. Pero Esperanza Aguirre sigue marcando el camino a Rajoy y a las demás comunidades donde gobierna el PP. Y si no, al tiempo.

1 comentario:

Federico Relimpio Astolfi dijo...

Sería preciso matizar un poco, Rafael. Muchas personas no tienes apenas tiempo libre a lo largo de la semana. Agradecerían que se abrieran los comercios, al menos los domingos por la mañana. Por otra parte, los centro urbanos están a cuarto de gas los domingos y festivos. Un malagueño que conozco fue a Londres recientemente y comentó el contraste de un domingo allí con todo abierto y un domingo en Málaga muerta. Cuando llegan los guiris en crucero en domingo se les ve aburridos. Podrían comprar más y generar más actividad y secundariamente, más empleo. No sé, son ocurrencias.
Federico Relimpio.