“Por la boca muere el pez”. Esta semana cumplimos el número 100 de “Por la boca muere el pez”. Quiero aprovechar esta pequeña esfemérides para agradecer a los muchos vecinos que me han animado a mantener esta sesión en el periódico. Con ella no he pretendido otra cosa que dar a conocer las contradicciones entre lo que se dice y lo que realmente se hace. El mensaje último no es otro que manifestar que la política y la ética deben siempre ir cogidos de la mano, que no todo vale. Y en la medida que hayamos contribuido a ello, bienvenido sea.
“Por la boca muere el pez”. Cien frases dan para mucho, otras muchas se han quedado en mis notas porque sólo podía colocar una semanalmente. De entre todas ellas podría señalar aquella de uno de los componentes del tripartito de “Si gano las elecciones reduciré el sueldo en un 30%”, lo cierto es que ganó, y en lugar de reducirlo prefirió subirlo. También recuerdo aquella del anterior alcalde, “La feria ha estado mal organizada”, pretendiendo criticar a la alcaldesa de Lebrija. Lo cierto es este señor ni siquiera estuvo en la feria sino en Palma de vacaciones y la feria fue muy aplaudida.
También recuerdo aquella del Sr. Caro del PP en una cena de navidad “Yo me comprometo a que el día 8 de enero el campo de fútbol estará listo para que jueguen nuestros clubs”. Lo cierto es que fueron varios meses más en que se tardó en usar el campo del fútbol por una mala gestión.Y es que por la boca muere el pez.